“Durante más de año y medio nunca me permitieron expresar públicamente mi versión”, gritó frente a decenas de periodistas.

En su condición de recluso, Zúñiga ofreció declaraciones poco antes de ingresar a la sede de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen, en La Paz, para prestar su testimonio sobre la toma de la Plaza Murillo, epicentro político del país.

Reiteró el exgeneral que todo fue orquestado por el Gobierno del exmandatario Arce para mejorar su imagen y demostrar que contaba con el apoyo del Ejército. en momentos en que era asediado por diversas protestas.

Además de Arce, mencionó en la organización de ese plan a los exministros Edmundo Novillo, Eduardo del Castillo, Marianela Prada, el vicetitular de Gobierno Jhonny Aguilera y los asesores Hugo Moldiz y Fernando Rodríguez.

El reo, quien fue trasladado esta mañana desde Cochabamba a La Paz, agregó que el blindado en el que se encontraba fue golpeado por el entonces ministro de Gobierno Eduardo del Castillo con la intención de que alguien de seguridad militar reaccionara y se generara el enfrentamiento.

Comentó que, pese a eso, fue capaz de controlar la situación, por lo cual considera héroes a los soldados que le siguieron en la intentona golpista.

El 26 de junio de 2024, cientos de militares al mando del exjefe del Ejército reforzados con tanquetas y artillados con calibre de guerra ocuparon la plaza Murillo, epicentro político del país, con el objetivo de hacerse del poder.

Las cámaras de televisión mostraron cómo la decisión de Arce de enfrentar esa asonada, la movilización ciudadana transmitida en directo por los medios de comunicación masiva y el respaldo internacional de otros gobiernos. conjuraron la acción castrense planificada con anterioridad.

Tras el fracaso del fallido golpe, Zúñiga, sus cómplices y los subordinados fueron aprehendidos.

El fiscal del caso, Franklin Alborta, sostuvo que como parte de este expediente penal serían investigadas 34 personas, entre militares y civiles.

jpm