Según el boletín Informe Pastrán, antes del retorno del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) al Gobierno, en el Caribe Norte solo se registraba un kilómetro de carretera pavimentada y apenas 67 en el Caribe Sur, situación que profundizaba el aislamiento histórico de estas regiones.
Ese impacto extraordinario en la conectividad, destacó la publicación, ha sido clave, desde 2007, para unir el Caribe con el Pacífico nicaragüense, fortalecer la integración territorial y dinamizar la economía regional, especialmente en comunidades indígenas y afrodescendientes.
Añadió que entre los proyectos emblemáticos en la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte sobresale el mejoramiento integral de la carretera Rosita–Puerto Cabezas, concluido al 100 por ciento y ejecutado en tres tramos: Sahsa–Puerto Cabezas Tramo I, de 25 kilómetros; Tramo II, de 32,5 kilómetros; y Tramo III, de 28,15 kilómetros.
Esta vía estratégica facilita el acceso a puertos y mercados, beneficiando de forma directa a más de 100 mil personas vinculadas a la producción, el comercio y los servicios.
Asimismo, el mejoramiento de la carretera Siuna–Rosita, con una extensión de 78,6 kilómetros, resultó fundamental para la integración regional y el fortalecimiento de los encadenamientos productivos en el Caribe Norte.
En la Región Autónoma de la Costa Caribe Sur, durante 2025 se concluyó la conexión entre El Tortuguero y la red vial troncal con El Rama, una obra de 96 kilómetros dividida en tramos inaugurados entre abril y julio de este año.
Con esa carretera se puso fin al aislamiento histórico de numerosas comunidades, al tiempo que se potencian la producción agropecuaria, la agroindustria y el comercio local.
El tránsito directo entre estas localidades reduce significativamente los tiempos de viaje y abre nuevas oportunidades para el desarrollo económico y social.
De esta manera, el programa vial impulsado por el Gobierno sandinista reafirma su impacto estratégico en la integración nacional y el desarrollo del Caribe nicaragüense.
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