En conversación con el ministro de Relaciones Exteriores angoleño, Teté Antonio, en la sede de la Cancillería, el diplomático expresó el reconocimiento de Bruselas a los esfuerzos realizados por el presidente, João Lourenço, como mediador designado por la Unión Africana para el conflicto entre la RDC y Ruanda.
Manifestó que la nación europea sigue con mucha atención la escalada de la violencia en ese país, donde grupos armados mantienen ocupadas varias localidades.
Ambas partes dialogaron sobre cuestiones como la retirada de la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en la RDC (Monusco), así como sobre los desafíos económicos a los que se enfrentan Burundi y Uganda, refirió una nota de la Cancillería angoleña.
Igualmente, trataron el crecimiento de las relaciones entre Angola y Bélgica y la necesidad de intensificar las consultas políticas entre los dos países.
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