El purpurado sostuvo en la Vigilia pascual del Domingo de Resurrección de la Semana Santa que la postura de los católicos por la fecha debe reflejarse en acciones concretas “para una transformación, tanto a nivel personal como en la sociedad”, subrayó el periódico.
Los cristianos –aseguró el cardenal en la Catedral de Asunción- hemos pecado de idealismo y de buenas palabras. Pero no bastan las intenciones, ni siquiera las oraciones que hacemos por la paz, por los pobres y por cuanta necesidad existe en nuestro país”.
Martínez llamó a seguir a Jesús en su lucha por los hombres, mediante “hechos concretos como alimentar a los hambrientos, sanar a los enfermos, enfrentarse con las autoridades, rebatir esquemas religiosos y criticar duramente la actitud de zorros de algunos y la voracidad de otros”.
La autoridad católica invitó a los cristianos católicos “a cuestionar su postura frente a cuestiones cruciales como el respeto a la vida, la protección de los más vulnerables, el genocidio de los pueblos indígenas y el deterioro creciente de la naturaleza por la ambición desmedida de unos pocos”.
Aludió también “a los explotadores y transgresores de la tierra, el agua y el medioambiente en general”, y los convocó “a abandonar sus ‘perniciosas prácticas’ y convertirse en defensores de la ecología ambiental y humana de nuestra casa común para las generaciones presentes y futuras”.
El arzobispo de Asunción llamó, además, a que las prácticas de corrupción se transformen en acciones honestas, solidarias «y que atiendan la necesidad de los pobres, de los excluidos» e instó “a la solidaridad y fraternidad contra la avaricia, el abuso del poder económico y político y las manipulaciones».
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