Ante la junta directiva del Consejo Nacional Electoral (CNE) concurrieron las fuerzas políticas debidamente acreditadas ante este órgano, uno de los cinco Poderes del Estado, y que cumplieron con los postulados recogidos en la Constitución y leyes electorales.
Del total de postulaciones, 11 corresponden a las diferentes oposiciones y una al oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) que presentó a Nicolás Maduro como su aspirante, y cuya candidatura recibió, además, el apoyo de las 10 agrupaciones que integran el Gran Polo Patriótico Simón Bolívar.
Hasta casi la medianoche del lunes, en que vencía el plazo legal del CNE para las inscripciones, se mantuvieron las puertas abiertas de su sede central para seguir recibiendo propuestas.
Los últimos en acudir anoche a ese órgano fueron el Movimiento Centrado que postuló a Enrique Márquez, y Fuerza Vecinal y un Nuevo Tiempo que lo hicieron con Manuel Rosales, actual gobernador del estado de Zulia, noreste de Venezuela.
Con anterioridad lo hicieron Luis Eduardo Martínez (Acción Democrática), Antonio Ecarri (Alianza del Lápiz), Juan Carlos Alvarado (Copei), Daniel Ceballos (Arepa), Benjamín Rausseo (Confederación Nacional Democrática) y Javier Bertucci (El Cambio).
También José Brito (Primero Venezuela), Claudio Fermín (Soluciones Venezuela) y Luis Ratti (Derecha Democrática Popular).
Si algo caracterizó a este proceso fue la transparencia y decencia con que cada uno de los postulantes presentó su candidatura, con opiniones diversas de sus plataformas, pero coincidentes en destacar el respeto a la constitucionalidad, a las leyes, y sobre todo, la voluntad de acatar lo que ocurra el 28 de julio.
En declaraciones la víspera, el presidente del CNE Elvis Amoroso, felicitó a todos los candidatos que se presentaron en las cinco jornadas y destacó que hicieron su inscripción todos los partidos y organizaciones que cumplieron con las leyes venezolanas para poder participar en las elecciones.
Precisó que los 12 postulados como candidatos recibieron el apoyo de 33 partidos políticos debidamente acreditados ante el Consejo Nacional Electoral, una cifra que a juicio de muchos evidencia la fortaleza de la democracia venezolana y de su sistema electoral.
En un nuevo hecho que develó, una vez más, las intenciones de la ultraderecha venezolana de alterar la paz que vive el país, fue la denuncia por las autoridades de nuevas tentativas de atentar contra la vida del presidente Nicolás Maduro, que fueron puestas en evidencia después por el fiscal general Tarek Williams Saab.
El vicepresidente de Movilización y Eventos del PSUV, Nahúm Fernández, denunció en un acto ante miles de personas que fueron aprehendidas tres personas entre la multitud que pretendían sabotear por separado la movilización y una de ellas portaba un artefacto para lanzarlo al jefe de Estado.
“Una vez más atentan contra la democracia y la libertad”, afirmó, y exigió a los organismos se haga justicia.
Fernández aseguró que “nuestro camino es la democracia y el voto”, y desestimó a los que andan convocando a la violencia y a tomar el atajo para que no haya elecciones el 28 de julio.
Maduro, por su parte, denunció ante la multitud los nuevos planes conspirativos en su contra y manifestó que “hoy (ayer) fueron capturados dos hombres con armas” que pretendían hacerle un atentado.
Ya declararon, forman parte del partido de extrema derecha fascista Vente Venezuela, están “convictos y confesos», aseveró.
Mediante su cuenta X, Saab reveló anoche que los ciudadanos Jerry Ostos Perdomo y Carlos Castillo se encontraban en actitud sospechosa, próximo a la tribuna donde se encontraba el jefe de Estado en el CNE.
El titular del Ministerio Público, que este martes ofrecerá nuevos detalles sobre el caso, puntualizó que Ostos y Castillo serán presentados ante Tribunal de Control por los delitos de terrorismo, asociación, magnicidio en grado de tentativa, instigación al odio y porte ilícito de arma de fuego en lugares prohibidos.
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