“La ejecución del proyecto demandará aproximadamente 80 mil toneladas de materia prima anualmente para la producción de biodiésel (…)”, aseguró el titular.
Según Molina, esta cifra no solo implica la expansión de la frontera agrícola, sino también resalta la necesidad fundamental de incrementar la productividad.
En la actualidad, según Molina, la producción promedio de soya es de 2,4 toneladas por hectárea, por lo cual se requiere aumentar esta capacidad productiva mediante el uso y desarrollo de tecnologías multiplicadoras.
Subrayó que la Planta de Amoniaco y Urea (PAU), la de Producción de Fertilizantes Granulados Cochabamba y la Planta Industrial de Carbonato de Litio desempeñan un papel central en este desafío de incrementar los rendimientos.
El presidente Luis Arce inauguró la víspera en el departamento de Santa Cruz la primera Planta de Biodiésel de Bolivia y de esa forma inició la reducción gradual de las importaciones de diésel y gasolina.
Arce anunció en el discurso inaugural un incentivo para incrementar la cosecha de materia prima para esta nueva factoría de biocombustibles.
“Bolivia a partir de hoy (martes), empieza a producir su propio biocombustible a partir de la materia prima que producen nuestros hermanos del agro y eso es importante, porque abandonamos poco a poco esa dependencia (de la importación)”, enfatizó el jefe de Estado.
El dignatario calificó esta fecha de “histórica”, pues con la fabricación de biodiesel el país altiplánico inicia la era de la industrialización de biocombustibles, una promesa de su campaña electoral cuando se postuló en 2020.
Además de esta primera planta de producción de biocombustibles, se construye otra en la ciudad de El Alto (La Paz) con las mismas características y una tercera planta de Aceite Vegetal Hidrotratado (HVO, por sus siglas en ingles) en Santa Cruz.
El jefe de Estado aseguró que todas estas industrias requerirán materia prima boliviana y por ello exhortó al sector agropecuario aumentar la producción para la seguridad alimentaria y la producción de biocombustibles.
“Hoy queremos aprovechar, que arrancamos nuestra planta de biocombustibles, también para lanzar una nueva medida de política económica de incentivo a la producción de todos aquellos productos que generan la materia prima para nuestras plantas”, dijo.
Explicó que el Gobierno nacional tomó la decisión de incentivar con un crédito muy ventajoso toda la nueva producción de soya, palma aceitera y macororó que vaya dirigida a ser materia prima para la producción de biocombustibles.
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