Tal objetivo formó parte ayer de las movilizaciones por el Día Internacional de la Mujer y de la llamada Agenda Transversal Mujeres del Plan Plurianual (PPA) 2024-2027, elaborado por el Ministerio de Planificación y Presupuesto.
El informe reúne programas y objetivos específicos para las políticas dirigidas a las mujeres en el próximo trienio.
También entre los objetivos trazados se pretende reducir en 16 por ciento la cifra de muertes violentas de féminas en las residencias y en 55 la mortalidad materna.
De igual manera, el plan procura que en 2027 un 45,2 por ciento de las mujeres estén en el mercado formal de trabajo, frente al 41 actual, según datos de la Encuesta Nacional por Muestra de Domicilios.
Para este año, la meta es del 41,4 por ciento.
«Existe un planeamiento de acuerdo con una alianza de acción, sea asociación con los estados, con los municipios, sea entre los propios ministerios», afirmó la titular del sector, Simone Tebet, después del evento de presentación del calendario.
Aludió que, para la cuestión de la ley de igualdad salarial, resulta «necesaria una asociación también con las confederaciones y federaciones empresariales para que nosotros podamos alcanzar las metas colocadas en el PPA».
Entre las iniciativas previstas para el cumplimiento de los propósitos figuran cursos de cualificación profesional para mujeres y categorías específicas, como las domésticas.
Otra finalidad es elevar al 45 por ciento el porcentaje de mujeres en los espacios de poder y de decisión.
Lo anterior incluye cargos de liderazgo en el sector público y privado, y candidaturas en elecciones.
En total, están previstos 14,1 mil millones (casi tres mil millones de dólares) en el Presupuesto Federal de 2024 para las medidas relacionadas con la agenda.
De acuerdo con Tebet, la mayoría de las acciones están dotadas en las áreas de Educación, Salud e Infraestructura.
La batalla contra la brecha salarial constituye una promesa de campaña de Lula, quien en octubre de 2022 defendió el protagonismo femenino y abogó por descartar ese flagelo cuando las personas, sin distinción de género, realizan funciones similares y presentan igual calificación.
«Vamos a regular. La mujer con el mismo servicio que el hombre tiene que ganar igual salario y no recibir menos», afirmó el entonces abanderado presidencial del Partido de los Trabajadores durante un mitin electoral en Aracaju, capital del estado de Sergipe (nordeste).
Estudios revelan que la disconformidad de sueldo con los hombres empuja a las mujeres a la inseguridad alimentaria y a jornadas laborales extenuantes.
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