El acuerdo 75-2024, oficializado en el Diario de Centroamérica, obedece a la falta de lluvias y al aumento de la demanda, por lo cual la autoridad faculta “al Administrador del Mercado Mayorista (AMM) para tomar las medidas necesarias y excepcionales”.
Ello, agregó la cartera en el texto que consta de cuatro artículos, para que cumpla su mandato de garantizar la seguridad y abastecimiento de energía eléctrica.
La medida responde a una solicitud planteada al MEM a finales de febrero pasado por el AMM, entidad encargada de operar el sistema y coordinar los despachos de las plantas generadoras.
La decisión sobrevino tras analizar información del propio AMM, de la Comisión Nacional de Energía Eléctrica y del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología, precisó el acuerdo.
Las acciones a realizar para cubrir la demanda de electricidad incluyen llamar a generar con recursos renovables o no, priorizar el mercado local ante las exportaciones y tomar en cuenta las importaciones necesarias.
De acuerdo con algunos reportes, este territorio centroamericano registró recientemente cifras récord de demanda máxima, cuando el suministro de generación con hidroeléctricas cayó, en comparación con el promedio.
Otro asunto preocupante guarda relación con que convocaron más generación con combustibles fósiles y la menor capacidad para el paso de barcos por el canal de Panamá afecta el traslado de combustibles.
Al existir mayor dependencia de estos productos carburantes, los expertos sugirieron que los generadores cuenten con el suministro suficiente y a tiempo para garantizar que sus centrales eléctricas funcionen cuando sean requeridas.
El Gobierno de Guatemala aprobó antes estado de emergencia en junio de 2023 y octubre del 2022, durante el paso de la tormenta tropical Julia, situación que tardó siete días.
Analistas advierten que en este país las empresas privadas controlan casi la totalidad de la cadena eléctrica y los costos son los más caros de la región.
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