Este cobarde acto terrorista se comete después de importantes logros alcanzados por el amigo pueblo ruso, en particular durante la operación militar especial y en las recientes elecciones en las que se demostró que el pueblo ruso apoya a su ejército y su liderazgo, afirmó el Ministerio de Asuntos Exteriores por medio de un comunicado.
Según la Cancillería, este acto demuestra una vez más el espíritu agresivo y desenfrenado del Occidente colectivo y su indiferencia hacia la vida de civiles inocentes, no sólo en Rusia sino en diversos países del mundo que se empeñan para preservar su soberanía e independencia.
La declaración subrayó la importancia de los esfuerzos combinados de todos los países del mundo para enfrentar estos crímenes y responsabilizar a sus autores y a los países que están detrás de ellos.
Apoyamos al pueblo ruso y sus líderes en el enfrentamiento del flagelo del terrorismo que se está extendiendo en muchas partes del mundo, indicó el texto.
Asimismo, Damasco expresó su más sentido pésame a las familias de las víctimas y deseó una pronta recuperación a los heridos.
Siria está en primera fila junto a la Federación de Rusia y otros países que luchan contra la plaga del terrorismo, concluyó el Ministerio su comunicado.
Varios terroristas con ropa de camuflaje y armadas con fusiles irrumpieron en el recinto de la sala de conciertos Crocus City Hall, ubicada en la provincia de Moscú, donde se produjo un tiroteo y luego los terroristas prendieron fuego a las sillas del auditorio, desde donde las llamas se propagaron por casi todo el lugar.
Según el Comité de Investigaciones de Rusia, más de 60 personas murieron en el ataque terrorista en Moscú.
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