De acuerdo con la fuente, el gobierno estadounidense tiene la intención de procesar al australiano por espionaje, con una pena de hasta 175 años de prisión.
Assange, de 52 años, lucha contra la extradición de Gran Bretaña a Estados Unidos desde 2019, donde enfrentó cargos de espionaje por publicar cientos de miles de documentos filtrados sobre las guerras en Afganistán e Iraq, así como cables diplomáticos en 2010 y 2011.
En 2022, el Reino Unido aprobó la extradición de Assange, que desde entonces ha intentado revocar, pero ha fracasado.
Sus abogados consideran que esto es una violación del tratado entre el sistema de justicia británico y Estados Unidos, el cual prohíbe la extradición por razones políticas.
Si el Tribunal Superior vuelve a rechazar el recurso, se agotará la opción judicial y la orden de extradición entrará en vigor.
Actualmente, Assange solo puede apelar ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Pero el equipo legal teme que si los jueces de Londres rechazan la apelación, el informático australiano será inmediatamente extraditado a Estados Unidos.
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