Reafirmo mi compromiso de continuar el camino de construcción de una nación y cumplir las aspiraciones del pueblo egipcio de crear un Estado democrático moderno, afirmó en un discurso tras jurar el cargo en la sede del Parlamento en la Nueva Capital Administrativa, ubicada a unos 45 kilómetros de El Cairo.
El-Sisi describió los objetivos de trabajo para su nuevo mandato de seis años, que abarcan política, asuntos exteriores, reformas económicas, protección social y desarrollo urbano.
Prometió fortalecer las relaciones equilibradas con todas las naciones para permitir que el país mantenga su papel en la promoción de la paz, la seguridad y el desarrollo globales.
A nivel de relaciones exteriores, la prioridad es proteger y preservar la seguridad nacional de Egipto en un entorno regional e internacional turbulento, subrayó.
También enfatizó su compromiso de adoptar estrategias que maximicen los recursos y capacidades económicos nacionales.
Además, aseguró que el Estado adoptaría reformas institucionales integrales para garantizar la disciplina financiera y lograr una gobernanza eficaz.
El-Sisi triunfó en los comicios celebrados en diciembre último tras obtener el 89,6 ciento de los votos válidos, según datos de la Autoridad Electoral Nacional de Egipto.
El presidente fue elegido por primera vez en 2014 tras conseguir el 96,91 por ciento de las papeletas y en 2018 por segunda ocasión al lograr 97 por ciento.
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