Poco más de un mes después de la primera designación, el mandatario nombró mediante un comunicado a quienes estarán en ese cargo de Sololá, Suchitepéquez, Petén, Escuintla y Chiquimula, estos sobre la base de las propuestas realizadas.
El jefe de Estado consideró la lista general en los casos en donde los Consejos Departamentales de Desarrollo (Codedes) o no enviaron terna, repitieron candidatos o incumplieron los plazos.
Así, se acuerdo con el escrito, para Huehuetenango, Izabal, Jutiapa, Quetzaltenango, Sacatepéquez y Chimaltenango.
En el caso de Baja Verapaz y Retalhuleu solicitó a los Codedes una nueva terna, al considerar que los aspirantes enviados no son depositarios de la confianza pública.
“Con esta decisión, los gobernadores asumen el compromiso de trabajar por sus departamentos con transparencia y apertura, así como de mostrar un compromiso inquebrantable con la democracia”, subrayó el texto.
Ello –agregó- en representación de los valores y principios de la administración actual de Guatemala.
De la mano del pueblo, Guatemala sale adelante, concluyó el presidente de este territorio centroamericano.
El pasado 20 de marzo el mandatario nacional definió a los gobernadores de este departamento capital, El Progreso, Santa Rosa, Totonicapán, San Marcos, Quiché, Zacapa y Jalapa.
Ante denuncias de perfiles vinculados con actores corruptos y la escasa transparencia en la elección, autoridades mayas y representantes de distintas organizaciones impugnaron antes algunas propuestas.
Llamaron al gobernante a atender las demandas de la población que manifestó su descontento y sufrió por ello amenazas así como intimidación, advirtieron.
Días atrás alcaldes señalaron que la falta de nombramiento de los gobernadores repercutiría en las ejecuciones de proyectos.
Estos cargos, diseñados en Guatemala para ejecutar el presupuesto de obras públicas, no son de elección popular, sino de designación y libre remoción por parte del Gobierno.
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