Según la fuente, la embarcación transportaba a decenas de personas después de que el río Tana, el más largo de la nación, se desbordara.
Muchos pasajeros aún están desaparecidos por lo que la cifra de muertos puede llegar a sobrepasar el centenar.
Las intensas lluvias afectan al sur de Kenya desde mediados de marzo y las autoridades del país contabilizan ya unos 37 mil 500 hogares afectados y cinco mil 700 cabezas de ganado perdidas.
Por otra parte, el ministro de Educación, Ezekiel Machogu, anunció una prórroga para la apertura de los colegios, programada en un principio para este lunes, pero que ahora tendrá que esperar hasta el 6 de mayo para retomar las clases, para evitar mayores riesgos y pérdidas de vidas.
Aunque todo el país de una forma u otra sufre los embates de los aguaceros, las regiones más afectadas son el centro y el oeste, incluida esta capital donde las inundaciones barren las casas más endebles en villas miseria instaladas en distritos pobres.
El drama es más trágico debido a que el Instituto de Meteorología pronosticó la continuación de las lluvias.
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