A propósito del debate convocado por el Consejo de Seguridad sobre el rol de esas poblaciones en los procesos de paz, la alta representante pidió terminar con las desigualdades estructurales de género como un paso indispensable.
“No existen soluciones rápidas para las políticas de poder arraigadas, las actitudes patriarcales o las estructuras sociales desiguales. Los cambios transformadores dependen de la acción nacional, que involucre a todos los segmentos de la sociedad”, agregó la funcionaria.
De acuerdo con cifras divulgadas en el encuentro, casi 300 defensores de los derechos humanos fueron asesinados el pasado año, 49 de los cuales eran mujeres.
“Estos son sólo los casos conocidos, probablemente haya muchos más”, advirtió al respecto Sima Bahous, directora ejecutiva de ONU Mujeres.
La titular de la agencia encargada de la igualdad de género instó a derribar las estructuras de poder y las normas dañinas que obstaculizan la participación plena y significativa de las mujeres jóvenes y las niñas, y que disminuyen su voz y su contribución crucial como líderes por derecho propio.
Fundamentalmente, convocó, debemos proteger la educación de las mujeres y las niñas, su autonomía y su libertad para decidir sobre todas sus opciones en la vida.
La cita, convocada por Mozambique, se centró en la necesidad de identificar sinergias entre la agenda de las mujeres, la juventud y la paz junto a la seguridad, con énfasis en sectores más jóvenes.
El órgano para la seguridad reconoció la pertinencia del tema en un contexto en que el espacio cívico para estos grupos cruciales continúa contrayéndose en zonas afectadas por conflictos.
Estas amenazas han aumentado la difusión del discurso de odio, la difusión de información errónea y el acoso sexual.
Las mujeres jóvenes y las niñas, especialmente aquellas con discapacidades y de comunidades marginadas, corren un mayor riesgo de sufrir violencia, alertó por su parte Felipe Paullier, subsecretario general de las Naciones Unidas para Asuntos de la Juventud.
“A pesar del creciente impulso político para la agenda de juventud, paz y seguridad, este compromiso no ha resultado en una mayor inversión para sostener la consolidación de la paz liderada por los jóvenes y una significativa participación”, lamentó.
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