Para el secretario general de ese movimiento político y militar, el Estado libanés tiene la plena responsabilidad de hacer seguimiento y presionar, a través de los mediadores, para poner fin a la agresión israelí.
Durante un discurso televisado, Qassem reclamó ejercer fuerza sobre Estados Unidos para que cumpla con el acuerdo, en su condición de patrocinador del alto al fuego.
Al reafirmar la continuación de la Resistencia, la referencia libanesa denunció la campaña patrocinada por Estados Unidos, Israel y países extranjeros, acompañada por un equipo interno que promueve la derrota.
En este punto, aclaró que Hizbulah no habla de una victoria absoluta, ya que esta es una batalla con ganancias y pérdidas.
«Nuestro pueblo entiende que triunfó en ciertos aspectos y perdió en otros, y hablamos de una victoria en términos de firmeza, de romper la invasión israelí y de la incapacidad del enemigo para acabar con la resistencia», resaltó.
A juicio de la autoridad, la imagen del retorno de los habitantes del sur refleja una posición de liberación popular y una postura noble de recuperación de la tierra.
En este punto, subrayó que el pueblo está hombro a hombro con el ejército libanés y la valiente Resistencia.
De acuerdo con la máxima figura de Hizbulah, el sur de Líbano afirma que no hay posibilidad de que Israel permanezca en él y continúe ocupándolo, y todos los sacrificios conducirán a la liberación de la tierra.
En sus palabras, enfatizó: «Quien tiene principios no se rinde cuando se le ejerce presión».
Qassem rechazó la opción extranjera de sumisión y humillación, y repudió a quienes justifican la agresión de Israel, sus asesinatos y negativa a retirarse de la nación.
El jefe de Hizbulah anunció la celebración el venidero 23 de febrero del funeral del líder mártir Hassan Nasrallah, asesinado por bombas israelíes y estadounidenses el 27 de septiembre pasado.
A propósito, resaltó que Nasrallah conquistó los corazones de la nación y del mundo, y logró convertirse en un símbolo, un modelo y un verdadero ícono.
Según Qassem, en el mismo funeral, se despedirá al secretario general Hashem Safieddine, quien cayó a principios de octubre y fue elegido para el cargo cuatro días después de la muerte de Nasrallah.
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