“Esto no es una cuestión de ahora (…), es muy pronto”, subrayó el titular de Exteriores ante la colocación del asunto en la palestra, tras los anuncios de Reino Unido y Suecia de su disposición a despachar soldados hacia Kiev una vez que termine la guerra con Rusia.

En declaraciones a la cadena Franceinfo, Barrot precisó que el envío de tropas será un debate a sostener en su momento, “una vez que la paz sea encontrada, en aras de garantizarla”.

Aunque no fue el tema central de la reunión de ayer en el Elíseo con la presencia de una decena de líderes europeos, el despliegue europeo en Ucrania fue evocado, con países como Alemania y Polonia contrarios al mismo.

El canciller alemán, Olaf Scholz, reaccionó incluso molesto al abordaje de una eventual misión de paz, al esgrimir que el Este de Europa está sumido en una guerra brutal.

Barrot en sus comentarios insistió en que los esfuerzos ahora deben dirigirse hacia el logro de una paz duradera en Ucrania y a garantías de que no se repita la agresión, término que Rusia rechaza, al acusar a occidente de propiciar el conflicto.

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