Reseña que el evento tiene lugar este domingo en Los Ángeles, Estados Unidos, y la producción Todavía…, del reputado Walter Salles, compite en las categorías de Mejor Película, Mejor Película Internacional y Mejor Actriz, con Fernanda Torres.
La cinta brasileña llega al Oscar con 38 premios y Torres es la estrella del momento.
El sitio refiere que una derrota de la artista brasileña será casi tan injusta como la de su madre, Fernanda Montenegro, en 1999.
Alude a un posible fracaso ante la actriz estadounidense Demi Moore, quien, con su carisma y simpatía, deleitó multitudes en la década de 1980, en producciones famosas como Ghost: Del otro lado de la vida (1990), Propuesta Indecente (1993), Asedio Sexual (1994), Striptease (1996), Hasta el límite de la honra (1997), entre otras.
El espacio testifica que, a pesar de todas estos largometrajes muy conocidos y, en general, grandes vendedores de entradas, Moore nunca fue tomada demasiado en serio por la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas ni por sus pares.
Pero nada de esto significa que ella sea una mala actriz, aclara R7.
Todo cambió en 2024, con el lanzamiento de La Sustancia, producción diferente de casi todo lo que había hecho hasta entonces. «Sacó de ese lugar donde todos estaban acostumbrados a verla. Funcionó», apunta el portal.
El hecho es que Moore llega como favorita a la competencia del Oscar a la Mejor Actriz. Eso es lo que los críticos y expertos en premios dicen en las últimas semanas.
«Después de todo, a Hollywood le encanta una historia de redención, que es lo que está pasando con ella. Es también una oportunidad para que la academia muestre diversidad premiando a una actriz que paso de los 60 años», indica la página digital.
Pero certifica que, sin ningún tipo de patriotismo y sin querer quitar méritos a la norteamericana, «Fernanda es una actriz superior. Así de simple».
Y no solo superior a Moore, considerada la principal competidora de la brasileña, sino también a decenas de otras actrices del mundo, recalca.
«Fernanda es realmente una profesional fuera de la curva, que puede hacer extremadamente bien en la comedia más rasgada y el drama más denso posible», argumenta.
La Sustancia es una buena película, discute temas importantes, pero fue mucho más incisiva de lo que merecía, considera el portal.
Todavía estoy aquí, a su vez, también tiene temas muy serios (la dictadura militar (1964-1985 y un drama familiar) y posee un desarrollo increíble.
R7 asegura que, si Torres y su filme fueran estadounidenses, se llevarían todos los premios.
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