Miembros de la misión diplomática cubana, etíopes graduados en la isla caribeña (etiocubanos), familiares de los combatientes locales fallecidos, veteranos de guerra y pueblo en general participaron en el sentido homenaje realizado en el Parque de la Amistad Etiopía-Cuba, conocido como el Monumento Tiglachin (Nuestra lucha, en amárico).

En tierras africanas se encuentra la sangre de 163 cubanos caídos en la contienda que marcó un momento decisivo en la defensa de la soberanía nacional y en el mantenimiento de la integridad regional, cuyos rostros y nombres son recordados en dos murales y que cada 5 de marzo reciben ofrendas florales en nombre de ambos pueblos.

La embajadora de La Habana designada en Addis Abeba, Meylin Suárez Álvarez, destacó la importancia de realizar la actividad en el parque que honra la memoria de esos combatientes internacionalistas.

En su intervención, Suárez Álvarez recordó las palabras del líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro: “Sin África, sin sus hijos e hijas, sin su cultura y costumbres, sin sus lenguas y sus dioses, Cuba no sería lo que es hoy. El pueblo cubano tiene, por tanto, una deuda con África que se acrecienta con la heroica historia que hemos compartido”.

Por su parte, el subdirector de Europa y América del Ministerio de Asuntos Exteriores etíope, Abraham Mengistu, elogió los lazos de hermandad entre ambos países y afirmó que la solidaridad y el sacrificio compartido en momentos cruciales de la historia cimentaron una relación inquebrantable, basada en el respeto mutuo y la colaboración en diversas áreas.

El presidente de la Asociación de Amistad entre los Pueblos de Etiopía y Cuba, Abebe Ayelew, expresó su eterna gratitud a la nación caribeña por su ayuda para mantener la integridad territorial etíope.

Ayelew subrayó la grandeza de Cuba al brindar educación y formación a miles de jóvenes de su país, muchos de ellos huérfanos de guerra y que actualmente contribuyen al desarrollo nacional.

Participaron además miembros del Ministerio de Defensa y del cuerpo diplomático latinoamericano.

Cuba y Etiopía celebrarán el 18 de julio próximo 50 años del establecimiento de relaciones diplomáticas, de ahí que la conmemoración de la batalla de Karramara tenga una connotación especial para ambos países porque reafirma una amistad basada en la solidaridad, la cooperación y la hermandad probada en tiempos difíciles.

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