Aunque se espera una disminución generalizada de la intensidad de las precipitaciones, áreas de Jiangnan y el sur del país siguen bajo advertencia por lluvias moderadas a fuertes, que podrían afectar los desplazamientos.
Según el Centro Meteorológico Nacional, a partir del día 7 de mayo se registrará una nueva ola de precipitaciones desde el oeste hacia el este del sur, acompañada de fenómenos convectivos como tormentas eléctricas y ráfagas de viento.
Las últimas 24 horas fueron el momento más intenso del ciclo actual y zonas de Guizhou, Guangxi, Hunan, Jiangxi, Anhui, Hubei, Chongqing y Sichuan registraron precipitaciones de entre 100 y 250 milímetros.
Por otro lado, en el norte del país el viento y el polvo continúan presentes debido al paso de una masa fría, mientras que las autoridades meteorológicas advierten sobre cambios bruscos de temperatura en el centro y este de China en los próximos días.
Entre mayo y junio comienza el período de mayores precipitaciones anuales en el gigante asiático, con picos máximos en agosto, cuando pueden producirse lluvias intensas como resultado de la alta humedad y la actividad de sistemas tormentosos.
Esta temporada se caracteriza por fenómenos climáticos extremos, que incluyen inundaciones, deslaves y tormentas convectivas, los cuales causan pérdidas humanas y daños materiales significativos en distintas regiones del país.
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