El portavoz de la Cancillería Lin Jian Señaló que no existe comparación posible entre ambas partes y criticó cualquier intento de distorsionar la naturaleza del problema, al tiempo que exigió respeto al principio de una sola China.

En este sentido, el vocero reafirmó que Taiwán es parte inseparable del territorio chino y que su cuestión es un asunto interno.

Respecto al Mar Meridional de China indicó que la situación en la zona es estable y que existe libertad de navegación y sobrevuelo conforme al derecho internacional.

Destacó que los desacuerdos deben resolverse mediante negociaciones entre los países directamente involucrados, sin injerencia externa que pueda generar tensiones.

Sobre la posible expansión de la OTAN en la región Asia-Pacífico, Lin Jian expresó el rechazo firme de Beijing y recordó que esta es una organización militar regional y defensiva, sin legitimidad para actuar fuera de su ámbito geográfico original.

Sobre este particular subrayó que la presencia de la alianza en la región solo contribuiría a la inestabilidad.

El portavoz destacó que Asia es un hogar común donde China promueve relaciones basadas en la confianza, cercanía y desarrollo compartido.

Instó a evitar dinámicas de confrontación y a no aplicar lógicas de la Guerra Fría al contexto asiático, enfocándose en acciones que favorezcan la paz y prosperidad regional.

Las declaraciones de algunos líderes europeos sobre Ucrania y Taiwán ocurrieron en el marco del Diálogo de Shangri-La, cuya declaración final ya China rechazó con anterioridad.

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