Machado fue detenido en el estado de Recife (nordeste) por orden del Supremo Tribunal Federal (STF).
La corte también autorizó a agentes federales a registrar y decomisar documentos en los capitalinos domicilios del teniente coronel Mauro Cid, exayudante de órdenes de Bolsonaro.
Inicialmente, el STF también había autorizado la detención de Cid, pero revocó la orden poco antes de que la PF la cumpliera.
Aun así, el militar fue trasladado a la sede de la fuerza del orden público en esta capital para prestar declaración.
En un comunicado, la PF se limitó a confirmar que se habían cumplido las disposiciones de arresto y registro, sin identificar a ninguna persona.
También en una nota emitida por su oficina de prensa, Machado negó estar involucrado en ningún acto ilegal.
«Ante el decreto de mi prisión preventiva (…) vengo a reafirmar públicamente mi total inocencia. No cometí ningún delito. No maté, no robé, no trafiqué con drogas. Solo pedí información sobre la renovación del pasaporte de mi padre, un hombre de 85 años», declaró el exministro.
Señaló que nunca había visitado ningún consulado ni embajada, ni en Brasil ni en el extranjero, y que solo había intercambiado mensajes con funcionarios diplomáticos sobre la situación de su padre.
El Partido Liberal, al que Bolsonaro y Machado están afiliados, informó que sigue de cerca la información sobre la detención del exfuncionario y espera más aclaraciones sobre el caso.
Acordeonista de una banda musical, con una trayectoria profesional, el otrora ministro se hizo conocido por aparecer tocando su instrumento durante transmisiones en vivo que el exmandatario ultraderechista promovía con miembros del equipo de Gobierno.
El portal G1 asegura que la Fiscalía solicitó el martes al Supremo la apertura de una investigación sobre Machado.
De acuerdo con el sitio, la PF afirma tener pruebas de que el exministro colaboró con el Consulado de Portugal en Recife para obtener un pasaporte que permitiera a Cid salir de Brasil.
El teniente coronel resulta pieza clave en el juicio a Bolsonaro por golpista.
En su confesión premiada ante la PF, el oficial de alto rango reveló detalles sobre un plan para impedir la asunción del presidente Luiz Inácio Lula da Silva tras las elecciones de 2022.
Según su testimonio, Bolsonaro se reunió con los comandantes de las tres fuerzas armadas para discutir la posibilidad de un golpe de Estado que anulara los resultados electivos.
Tal aspiración violenta incluía la detención de opositores políticos y del ministro Alexandre de Moraes, del Supremo.
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