En medios de prensa del poder ciudadano la mandataria destacó la necesidad de asegurar excelentes tiempos en un mundo complejo, convulso y agitado, “que desafía todas las normas de la convivencia entre la familia humana y amenaza a todos”.

“Un mundo en el que, a pesar de todo, el espíritu y la fe deben prevalecer, y nos corresponde alzar el corazón, el alma y decir con todas nuestras fuerzas: todo esto también pasará y tenemos que lograr que pase», manifestó.

Llamó a lograr que la humanidad sobreviva, y a defender y preservar el sentido común, pues según afirmó, es necesario “cuidar las benditas tierras que Dios nos ha dado”, la naturaleza y sobre todo, la vida de los seres de este planeta.

«Estamos más amenazados que nunca, nunca creo yo en toda la historia de la familia humana hemos tenido tanta amenaza real, tanta amenaza de destrucción, insensibilidad, muerte, dolor y cómo nos quedamos viendo hipnotizados las pantallas, los teléfonos y esa permanente exposición a la tragedia, al dolor, como que también nos vuelve insensibles”, enfatizó.

A decir de la dirigente sandinista, de alguna manera las personas llegan a convencerse de que no se puede hacer nada, “pero sí podemos hacer, y sí debemos hacer y alzar nuestras voces y alzar nuestros corazones y elevar nuestras plegarias”.

En ese sentido, pidió trabajar con todas las fuerzas y en todos los espacios posibles para detener las catástrofes, el sufrimiento y “para promover paz y derecho, paz y bienestar, paz y soberanía, paz, paz, paz, como decía nuestro infinito Rubén (Darío)”.

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