Un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores lamenta, además, lo ocurrido en ese estado del sur estadounidense, donde se reportaron hasta la fecha 43 muertos (incluidas 15 niñas), decenas de desaparecidos y cientos de personas desplazadas.

Según el texto oficial, el fenómeno afloró por los efectos de la crisis climática, lo cual obliga a adoptar urgentes medidas conjuntas a nivel internacional.

Medios locales indicaron que, desde la noche del jueves, se registraron precipitaciones generalizadas de entre 10 y 15 centímetros, con algunos informes de más de 25 centímetros, desde San Angelo hasta Kerrville, lo cual provocó múltiples emergencias por inundaciones repentinas al comenzar el fin de semana festivo del 4 de julio.

Actualmente, el centro de Texas sufre una de las peores sequías de Estados Unidos y los suelos completamente secos se inundan muy rápidamente.

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