Durante la celebración del Día de la Rebeldía Nacional en el municipio de 10 de Octubre, el pueblo capitalino rememoró la proeza del movimiento revolucionario que, guiado por el joven Fidel Castro, intentó tomar por las armas las principales fortalezas orientales del gobierno de Fulgencio Batista (1952-1958)

Pese a no conseguir el objetivo, los insuegentes renovaron las ansias de independencia de toda una nación que sufría entonces los desmanes de un régimen que había accedido al poder mendiante un golpe de Estado.

Según informó este martes el noticiero de la televisión, el territorio habanero destaca por sus resultados integrales en programas de envergadura económica y social y el vínculo permanente con el pueblo.

En ese contexto, el primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) en La Habana, Liván Izquierdo, recordó que los jóvenes asaltantes del Moncada (Santiago de Cuba) y Carlos Manuel de Céspedes (Granma), ambos en oriente, sirven de inspiración para las nuevas generaciones.

Aún en medio del cerco económico, financiero y comercial del gobierno de Estados Unidos contra la isla, en Cuba “debemos desterrar todo vestigio de pesimismo, desánimo o derrotismo, siempre inspirado en el legado del líder histórico de la Revolución Fidel Castro, afirmó Izquierdo.

Las autoridades de la capital reconocieron los resultados de empresas e instituciones destacadas en la emulación por la fecha.

En la conmemoración estuvieron presentes además los miembros del Buró Político del PCC, general de brigada José Amado Guerra, secretario del Consejo de Ministros, y el canciller Bruno Rodríguez.

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