Este plan se ejecuta con el apoyo del Banco Mundial y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Las maquinarias forman parte de una estrategia orientada a implementar un modelo de riego eficiente, promover el uso responsable del agua y lograr una mejora significativa en la producción de arroz en la cuenca baja del río Yaque del Norte.

En su primera etapa, beneficiará a tres mil 56 productores, con la proyección de extenderse a toda la cuenca.

El mandatario destacó que la modernización tecnológica del sector agrícola es una prioridad de su gobierno, al afirmar que estos avances incrementan la eficiencia y la productividad, y permiten reducir de forma gradual la dependencia de mano de obra foránea.

La mayoría de la mano de obra en el agro dominicano está compuesta por trabajadores inmigrantes, la mayoría ciudadanos de la vecina Haití.

Con la nueva maquinaria incorporada, el ministro de Agricultura, Limber Cruz, aseguró que el país alcanzará una agricultura más resiliente y productiva, con importantes ahorros de tiempo y recursos.

El plan beneficiará a los municipios Mao, Esperanza, Laguna Salada, Las Matas de Santa Cruz, Castañuelas, Villa Vásquez, Montecristi y Guayubín, con perspectiva de ampliarse a toda la cuenca del Yaque del Norte y, posteriormente, al río Yuna.

Entre los equipos entregados figuran ocho sembradoras de 20 hileras con depósitos de semillas, cuatro tractores articulados equipados con GPS para labores de fumigación y fertilización y seis tractores adicionales.

Además, dos niveladoras para el acondicionamiento del suelo y cuatro empacadoras de paja de arroz.

Asimismo, se incorporaron cuatro segadoras de forraje del grano y 12 medidores de flujo para registrar el consumo de agua del sistema en comparación con el método convencional, entre otros equipos.

El proceso de mecanización contempla cero labranza, fumigación y fertilización, manejo de rastrojos y empacado de paja, una medida clave para mitigar los efectos de la sequía y apoyar a los ganaderos en zonas áridas.

En abril de este año el mandatario anunció su intención de “eliminar progresivamente” a los obreros extranjeros en la agricultura y la construcción, promoviendo la proporción laboral 80-20 (80 por ciento dominicanos, 20 por ciento extranjeros).

También señaló que la presencia de “mano de obra haitiana irregular” en el campo no puede continuar indefinidamente, y que el Estado buscará impulsar la mecanización agrícola para reducir la dependencia de estos.

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