Entre enero y abril último llegaron a esta nación indochina más de 7,67 millones de viajeros foráneos, casi la mitad de los cuales procedieron de China (1,98 millones) y de Corea del Sur (1,58 millones).
De acuerdo con la entidad, el flujo de turistas chinos exhibió un impresionante crecimiento interanual del 56,7 por ciento, mientras el de Japón registró un alza de 18,9 puntos porcentuales.
Aunque con cifras de emisión muy inferiores a la de los principales mercados, sobresalieron también Filipinas, Cambodia y Laos con incrementos respectivos de 98,3, 79,6 y 44,7 por ciento respecto al primer cuatrimestre del pasado año.
Rusia, por su parte, se consolidó como el mayor emisor europeo con más de 166 mil llegadas en los primeros cuatro meses de 2025, para un incremento del 110,9 por ciento.
Autoridades de la llamada industria sin chimeneas establecieron aquí como metas para el año en curso recibir a entre 22 y 23 millones de viajeros foráneos y lograr que el sector aporte contribuya entre un seis y un ocho por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del país.
El turismo vietnamita experimentó el pasado año una notable reanimación, lo que le permitió colocarse como líder del Sudeste Asiático al alcanzar el 98 por ciento del nivel previo al azote de la pandemia de Covid-19 y aventajar a Malasia (94), Tailandia (88), Singapur e Indonesia (86) y Filipinas (72) en su tasa de recuperación.
En 2024 Vietnam recibió alrededor de 17,5 millones de visitantes extranjeros, un aumento de 38,9 puntos porcentuales con respecto al año anterior, y atender a 110 millones de viajeros nacionales, para un ligero aumento de 1,6 por ciento. Los ingresos del sector fueron de alrededor de 33,6 mil millones de dólares.
Según especialistas, este impresionante crecimiento puede atribuirse, fundamentalmente, a las favorables políticas de visados establecidas por esta nación indochina, que ahora ofrece exenciones de visados a ciudadanos de 25 países.
oda/mpm





