La información fue proporcionada por Tania Marques, jefa adjunta de la Misión de Observación Electoral (MOE) de la UE, tras celebrar la primera reunión con los tres integrantes del Consejo Nacional Electoral (CNE), ente rector de los procesos plebiscitarios en esta nación centroamericana.
Marques explicó que el acompañamiento se realizará antes, durante y después de los comicios, como parte del compromiso con la transparencia y el fortalecimiento democrático.
Según anticipó, la MOE-UE tiene como objetivo acompañar todo el proceso, observar su desarrollo y presentar un análisis independiente sobre su transparencia y legalidad.
Detalló que la presencia de los representantes del llamado viejo continente se llevará a cabo en varias fases.
Una primera misión llegó a Tegucigalpa hace dos días para iniciar las labores preparatorias. Un segundo equipo arribará el 11 de noviembre y, finalmente, unos 38 observadores se incorporarán en fechas cercanas a la cita con las urnas.
Además, participará el personal diplomático europeo acreditado en este país, agregó la funcionaria.
En la reunión, el CNE reafirmó el compromiso de Honduras con la transparencia, la cooperación internacional y la integridad del proceso electoral, a pocas semanas de la contienda.
Más de 6,5 millones de hondureños -de una población de 10 millones- están convocados el último domingo de noviembre a elegir al nuevo presidente (a), tres designados presidenciales (vicepresidentes), 298 alcaldes, 128 diputados al Congreso Nacional (Parlamento) y 20 al Parlamento Centroamericano.
Según diversos sondeos, los presidenciables con mayores opciones de triunfo son Rixi Moncada, del oficialista partido Libertad y Refundación; Nasry Asfura, del Partido Nacional; y Salvador Nasralla, del Partido Liberal, las dos formaciones tradicionales de derecha que encarnan el llamado bipartidismo.
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