El vehículo transportaba a trabajadores de instalaciones petroleras cuando fue atacado cerca de la localidad de Saalo, en el este del país, una zona afectada por recurrentes incidentes de violencia armada.

El Ministerio de Energía sirio condenó el atentado, calificándolo como un “cobarde acto terrorista”.

En un comunicado difundido a través de sus plataformas oficiales, la entidad señaló que el ataque ocurrió en la carretera que conecta Deir Ezzor con Al-Mayadeen.

El Ministerio agregó que estas acciones no detendrán los esfuerzos de sus trabajadores por proteger las instalaciones petroleras y garantizar la continuidad de la producción energética en el país.

Estos crímenes solo reforzarán la determinación del personal del sector energético de seguir cumpliendo su misión al servicio de la nación, concluyó el comunicado.

Hasta el momento, ningún grupo reivindicó el ataque.

La región de Deir Ezzor ha sido escenario de actividad de células remanentes del grupo Estado Islámico (daesh), que a menudo llevan a cabo ataques esporádicos contra fuerzas gubernamentales y objetivos civiles.

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