El vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores Lin Jian reiteró su apoyo a Malasia en el ejercicio de la presidencia rotatoria de la Asean (Asociación de Naciones del Sudeste Asiático), principal mediador para la resolución de la última escalada entre esas dos naciones vecinas.

Además, el portavoz recordó que desde el estallido del conflicto fronterizo Beijing promovió activamente el diálogo y la reconciliación por medios propios.

Agregó que China continuará desempeñando un papel constructivo en el fortalecimiento de la confianza mutua, la consolidación del alto el fuego y la búsqueda de una solución pacífica al diferendo.

Camboya y Tailandia mantienen tensiones fronterizas intermitentes desde hace más de una década, mientras la Asean impulsa esfuerzos regionales para preservar la estabilidad y la cooperación en el Sudeste Asiático.

Kuala Lumpur será sede el próximo 26 de octubre de la Cumbre de la Asean y Malasia quiere además introducir la firma de un acuerdo de paz entre los dos países con la participación del presidente estadounidense Donald Trump.

El ministro de Asuntos Exteriores de Malasia, Mohamad Hasan, hizo el anuncio y expresó la esperanza de que «la cumbre marque el comienzo de una paz duradera».

El republicano, que se adjudica el logro de este pacto de paz entre Camboya y Tailandia, va a completar su visita a la región con la participación en el Foro de Cooperación Asia-Pacífico (APEC) en Corea del Sur y una agenda en Japón.

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