La representante permanente de la nación neogranadina ante Naciones Unidas, embajadora Leonor Zalabata, afirmó que tal designación no solo perjudica al pueblo antillano, sino que desconoce su contribución histórica a la paz, de lo cual Colombia puede dar fe.
“Cuba ha sido un actor fundamental en la paz en nuestro país, desempeñando un papel central para el logro del Acuerdo Final de 2016 entre el Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo y acompañando su implementación, en particular en los procesos de cese al fuego, desarme, desmovilización y reincorporación de excombatientes”, sentenció.
Añadió que la nación caribeña ha sido y sigue siendo un socio confiable en los esfuerzos por consolidar la paz en su país y en la región.
“Por ello, Colombia reitera su llamado a retirar a Cuba de esa lista unilateral que no solo carece de justificación, sino que amplifica los efectos negativos del bloqueo sobre la población cubana”, remarcó Zabaleta.
Añadió que, hoy más que nunca, América Latina y el Caribe deben reafirmarse como una Zona de Paz.
“Como países soberanos e independientes debemos actuar de manera unida y solidaria abrazando la democracia, defendiendo la autodeterminación de nuestros pueblos y rechazando toda política injerencista, unilateral y contraria al derecho internacional que pretenda interferir en la soberanía, la independencia o la conducción de nuestros asuntos internos”, enfatizó.
Planteó además que para la amplia mayoría de la comunidad internacional está claro que las medidas coercitivas unilaterales contra Cuba son contrarias al derecho internacional y violan los principios fundamentales consagrados en la Carta de las Naciones Unidas.
“No hay duda tampoco de que estas medidas afectan de manera directa al pueblo cubano, obstaculizan su desarrollo económico y social, restringen el acceso a insumos esenciales y humanitarios, limitan sus transacciones financieras y encarecen sus operaciones comerciales y logísticas”, denunció.
También expuso que los más recientes informes del secretario general dan cuenta del profundo impacto económico y humano del bloqueo que limitan el desarrollo e impiden a Cuba avanzar en la plena implementación de la Agenda 2030 y el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
“Esperamos que llegue el día en el que el llamado abrumadoramente mayoritario de la comunidad internacional sea finalmente atendido y que el pueblo cubano pueda ejercer plenamente sus derechos sin el peso de un bloqueo injusto, anacrónico e incompatible con los principios fundamentales de esta organización”, concluyó.
Desde hoy y hasta mañana se presenta aquí ante la Asamblea General la resolución Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba, respaldada desde 1992 por la mayoría de los países del mundo.
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