Un reporte de la entidad agregó que se sienten animados por una observación de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) que subraya la relevancia de la seguridad del crudo, aunque ambos siguen muy alejados en cuanto a las perspectivas de la demanda.

Se trata de un comentario escrito por el analista de seguridad energética Ronan Graham y el investigador Ilias Atigui publicado el lunes.

En esa nota se expresa que aunque la dependencia petrolera mundial está disminuyendo, sigue muy arraigada, por lo que las interrupciones del suministro pueden seguir causando un daño económico significativo y tener un impacto negativo sustancial en la vida de las personas.

Agregaron los entendidos que existe un alto grado de incertidumbre en torno a la rapidez con la que caerá la demanda, lo que deja a las compañías petroleras ante decisiones difíciles y comercialmente arriesgadas en torno a la inversión en exploración y producción.

Por demás, respondieron en el cártel al señalar que en la OPEP se sienten alentados por este mensaje y por la referencia a la importancia que sigue teniendo el petróleo para el mundo.

Y añadieron que los llamados de la AIE a no realizar nuevas inversiones en petróleo y gas natural contribuyeron significativamente a esta incertidumbre.

Ambas partes tienen opiniones muy divergentes sobre la demanda petrolera para este año y los siguientes. La AIE espera que la demanda alcance su punto máximo en 2030, mientras los productores de la OPEP no ven ningún pico en sus previsiones, que se extienden hasta 2045.

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