Los secuestrados supervisaban la carga de crudo proveniente de este país a un buque chino en el puerto Seme-Kpodji y aún son rehenes de las autoridades de Benín, señaló el Consejo Nacional para la Salvaguardia de la Patria (CNSP), instalado aquí tras el golpe de estado julio de 2023.
Níger aplicará todas las medidas necesarias para lograr la liberación de sus ciudadanos plagiados, defender sus derechos y proteger intereses cruciales de este país, señalaron fuentes del CNSP.
De su lado, Porto Novo indicó que dos ciudadanos nigerinos arrestados arribaron a esa nación con documentos falsos y de ninguna forma son empleados de la mencionada compañía.
Pero las autoridades de este estado noroccidental africano afirman que en Benín fue secuestrado el vicedirector general de Wapco-Niger, Aminu Jadisatu Ibra, y otros cuatro directivos de esa esa empresa.
El gobierno de Níger a acusa al presidente de Benín, Patrice Talon, de permitir continuadas violaciones del acuerdo sobre transporte petrolero.
De su lado, el primer ministro nigerino, Ali Majaman Lamin Zein, acusó al país vecino de instalar allí bases militares estadounidenses, donde se entrenan grupos terroristas que serán enviados para desestabilizar a esta nación sin salida al mar.
A principios de mayo pasado, Porto Novo prohibió la entrada a aguas nacionales de tanqueros que deberían recoger el crudo del recién estrenado oleoducto que va de Níger a las terminales de exportación en el golfo de Guinea, destacó la prensa en esta urbe.
Sin embargo, el 15 de mayo último, las autoridades beninesas autorizaron la entrada a aguas territoriales de un tanquero de China, cuya Corporación Nacional de Petróleo y Gas participó en la construcción del citado gasoducto de mil 980 kilómetros de largo.
El portavoz del CNSP, el coronel mayor Amadou Abdramane, recordó la necesidad de cumplir los tres principales acuerdos para regular el transporte del crudo nigerino para su exportación a través de Benín.
De acuerdo con esos documentos, ninguna parte puede bloquear por cualquier motivo, el funcionamiento normal del sistema de transporte. “Ni siquiera un posible conflicto entre Níger y Benín puede justificar jurídicamente un obstáculo en ese sistema de transporte”, aclaró.
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