De acuerdo con un comunicado de la cartera, los participantes en el encuentro destacaron lo provechoso del Tratado entre esta nación latinoamericana, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) para las tres partes.
En la reunión, con la presencia del director general de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz, Odracir Barquera, y otros altos directivos, se abordó el interés por impulsar la expansión a todo el país y el diseño de una estrategia para fortalecer las cadenas de valor.
Esta industria es de las más relevantes en México y el sector más integrado y consolidado en Norteamérica, subrayó Ebrard.
Al evento asistieron representantes de BMW, Ford, General Motors, Mazda, Mercedes Benz y Stellantis.
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, prometió la semana pasada subir aranceles a las mercancías provenientes de México, Canadá y China desde el primer día de su administración, en represalia por la inmigración ilegal y el “crimen y las drogas”, según dijo.
La nación norteña, sin embargo, perdería unos 400 mil empleos y se reduciría su crecimiento de concretarse esos impuestos, según estimaciones del gobierno mexicano.
Al difundir tales datos con base en consultas a la industria automotriz y de autopartes, Ebrard señaló el 27 de noviembre que el primer impacto de ese impuesto será sobre las compañías estadounidenses General Motors, Stellantis y Ford Motor Company.
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