«El poder monopolístico, cada vez mayor, explica en gran medida el crecimiento de la concentración de riqueza extrema y la desigualdad”, sustentó la organización no gubernamental en su informe “El saqueo continúa”, publicado este lunes.
Según el análisis, un 18 por ciento de la riqueza actual de los millonarios es fruto del poder de los monopolios, los cuales pueden controlar los mercados, establecer las reglas y los términos de intercambio con otras empresas y trabajadores e incluso fijar precios más altos sin perder cuota de negocio.
Con un patrimonio neto de 219 mil 400 millones de dólares, Jeff Bezos es el cofundador de Amazon, el grupo empresarial estadounidense que concentra como mínimo el 70 por ciento de las compras por Internet en Alemania, Francia, el Reino Unido y España, ilustró Oxfam.
Mientras Aliko Dangote (11 mil millones de dólares) es la persona más rica de África, y ostenta un “cuasi monopolio” en el sector del cemento en Nigeria y un considerable poder de mercado en el continente africano, indicó otro ejemplo de la publicación.
El 68 por ciento de los principales magnates reside en países ricos del norte global, y el aumento de los nuevos ricos en naciones subdesarrolladas tampoco debería entenderse como un signo positivo, aunque el fenómeno creció durante la última década, juzgó la fuente.
Para cientos de millones de personas trabajadoras, argumentó, esto quiere decir que las ganancias de su trabajo benefician en gran medida a los superricos del norte y a los opulentos del sur.
La enorme concentración de riqueza, recuerda el estudio, está vinculada a los sistemas coloniales, tomando en cuenta el legado histórico y sus versiones modernas.
Según los investigadores Utsa Patnaik y Prabhat Patnaik, se estima que, entre 1765 y 1900, el Reino Unido extrajo de India riqueza por valor de 64,82 billones de dólares y, por promedio de la distribución de los ingresos durante ese período, 33,8 billones de dólares fueron a parar a manos del 10 por ciento más rico de su población, rememora el texto.
En opinión de Oxfam, resulta “imposible llegar a entender por completo la naturaleza de la actual crisis de desigualdad sin asumir la alargada sombra que proyecta el pasado colonial, y cómo este continúa alterando nuestro presente”.
Las cadenas de suministro mundiales y las industrias de procesamiento para la exportación son los actuales sistemas coloniales de extracción de la riqueza desde el Sur hacia el Norte, advierte la pesquisa internacional.
oda/mjm