Así lo declaró Zhao Ping, portavoz del Consejo Chino para la Promoción del Comercio Internacional (Ccpit) durante una conferencia de prensa en la que rechazó además el proteccionismo y los aranceles abusivos.
«En un mundo lleno de incertidumbres, la estabilidad de China es una gran oportunidad», subrayó la vocera.
Destacó que el país ofrece un entorno de políticas transparente, estable y predecible, además de un mercado de consumo masivo, el sistema industrial más completo del mundo, una capacidad de producción avanzada y un amplio capital humano calificado.
Zhao reiteró que el Ccpit continuará como un puente entre China, Estados Unidos y el resto del mundo empresarial global.
Expresó la esperanza de que Washington responda a las expectativas de ambos países y el mundo, abandone el uso de aranceles como herramienta de presión y promueva, a través del diálogo, una relación comercial estable, saludable y sostenible con Beijing.
En otro momento, destacó la visita a China del presidente y director ejecutivo de la compañía estadounidense Nvidia, Jensen Huang, en un contexto marcado por las tensiones comerciales entre el gigante asiático y el país norteamericano.
Esta visita fue realizada a invitación del Ccpit y tuvo como punto culminante una reunión con el viceprimer ministro chino, He Lifeng, quien reiteró la bienvenida a empresas estadounidenses para profundizar su presencia en el mercado chino.
Zhao destacó además que la posición del sector empresarial global también es inequívoca y en este sentido dijo que durante la reciente reunión del Consejo Consultivo Empresarial de la APEC en Canadá, las empresas de Asia-Pacífico criticaron las medidas arancelarias de Washington por sus efectos negativos en la economía regional.
La escalada en la guerra arancelaria desatada por el presidente Donald Trump tiene a China en su mira, nación que respondió con similares tarifas a Estados Unidos y la frase: “China no quiere enfrentamientos, pero no tiene miedo de pelear”.
Este es el panorama: los productos chinos importados al país norteamericano están sujetos hasta a un 145 por ciento de aranceles (125 por ciento agregados en los últimos días y 20 por ciento bajo la excusa del fentanilo), mientras que todos los bienes provenientes de Estados Unidos enfrentan un 125 por ciento al llegar aquí.
La Casa Blanca anunció que elevará las tarifas al 245 por ciento en el caso de que una investigación de la Secretaría de Comercio detecte «amenazas para la seguridad nacional» en las importaciones de minerales críticos desde el gigante asiático.
Ya la aduana china notificó que si Washington insiste en el juego arancelario y sube nuevamente estos gravámenes, Beijing no le prestará más atención.
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