“Es muy relevante saber que Chetumal tendrá un sistema integral de vehículos eléctricos. Es un paso gigantesco, porque son autobuses mexicanos, hechos en México”, celebró el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, al referirse a la noticia.

Los Taruk, fabricados por las empresas MegaFlux, encargada del sistema de tracción eléctrico o tren motriz, y DINA, responsable del diseño y construcción de los vehículos, recibió para su desarrollo el apoyo del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencia y Tecnologías.

En opinión de Ebrard, el que gobiernos y empresas privadas opten por estos vehículos diseñados y fabricados en la nación resulta muy positivo, en tanto impulsan el desarrollo tecnológico y la innovación en el país y se ayuda a la creación de empleos para mexicanos.

“México debe seguir apostando por la innovación y por la producción local, si queremos garantizar el desarrollo y bienestar de la población”, afirmó en declaraciones versionadas por un comunicado de la cartera.

En marzo pasado, el propio Ebrard entregó a Taruk la certificación de Hecho en México, y anunció que las primeras unidades del vehículo –con capacidad para 60 pasajeros, la mitad sentados y la otra de pie- operarían en Ensenada, Baja California.

“Lleva meses de pruebas, de ajustes, de ensayo-error, de mejorar su desempeño, el número de kilómetros de autonomía, de aumentar su eficiencia frente a cualquier otro vehículo eléctrico de Asia o de cualquier otra región del mundo. Y es mejor el mexicano”, destacó entonces.

Taruk se inserta en el Plan México, una estrategia de desarrollo con la participación de los sectores público y privado que apunta a producir más para el consumo interno, sustituir importaciones, fortalecer el comercio exterior y fomentar la inversión en el marco del desarrollo regional.

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