Durante su intervención, divulgada aquí en la televisión local, la delegada nicaragüense recordó que, desde la primera Cumbre Global de Mujeres en 1995, la voz de las féminas se ha fortalecido en la esfera pública, dejando una huella profunda en las políticas y modelos de desarrollo.
“Un principio fundamental en nuestra Revolución Popular Sandinista es que, sin la participación de la mujer, no hay Revolución”, enfatizó.
Asimismo, destacó que el protagonismo femenino en Nicaragua se manifiesta en los programas sociales impulsados por el Gobierno, en el acceso gratuito a la salud y la educación, así como en los proyectos económicos que promueven el empoderamiento y la autonomía de miles de mujeres, especialmente en las zonas rurales.
Bajo el liderazgo de los copresidentes Daniel Ortega y Rosario Murillo, Nicaragua ha alcanzado un reconocido liderazgo en equidad de género, con mujeres ocupando el 56 por ciento del gabinete de Gobierno y más del 57 por ciento de los cargos de elección popular, reflejo de un modelo democrático e inclusivo, resaltó.
Transmitió el saludó al presidente de China, Xi Jinping, al Partido Comunista y al pueblo de la nación asiática, expresando su agradecimiento a los organizadores del evento por acoger este importante espacio de diálogo internacional.
Ortega subrayó que, tras el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Nicaragua y China, ambas naciones transitan una nueva etapa de cooperación y desarrollo, construyendo “un futuro de dignidad, prosperidad, paz y felicidad para nuestros pueblos”.
La representante nicaragüense condenó las medidas coercitivas unilaterales impuestas contra países en desarrollo, que afectan de manera desproporcionada a mujeres y niñas, y reafirmó el rechazo de Nicaragua a esas prácticas contrarias al derecho internacional y a los principios de igualdad.
Reiteró que, aunque ha habido avances desde 1995, aún persisten desigualdades y violencias de género, por lo que llamó a renovar los compromisos y acelerar la acción global a favor de la igualdad.
Manifestó su respaldo a las iniciativas del presidente Xi Jinping, como la Franja y la Ruta, la iniciativa para el desarrollo y la gobernanza global, las cuales —afirmó— promueven los valores comunes de la humanidad y el intercambio solidario entre los pueblos.
Ortega reafirmó el pleno apoyo de Nicaragua al principio de una sola China, destacando su importancia para la estabilidad y la paz mundial.
Por último, citó a la copresidenta Rosario Murillo, quien expresó que “las mujeres somos la energía del presente, la fuerza de la victoria y la fortaleza singular de nuestros pueblos de amor.”
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