La Casa de América Latina en París acogió la velada que protagonizaron dos artistas cubanos virtuosos en sus instrumentos, el clarinetista Lester Chio y la pianista Eralys Fernández, quienes deleitaron al público en la repleta sala con temas del repertorio de la nación antillana e internacional.

Franceses amigos de Cuba, diplomáticos de diversos países y cubanos residentes salieron complacidos de la céntrica instalación, donde el valor universal de la cultura traspasó fronteras y voló lejos en una noche otoñal de la Ciudad de la Luz.

En una primera parte, Chio ofreció aplaudidos solos, con obras entre otros del argentino Astor Piazzolla, considerado uno de los grandes músicos del siglo XX, como Night Club 1960 y Ave María.

Después de unas cinco piezas de clarinete, Fernández disertó al piano con los temas del genial Lecuona que evocan las raíces españolas de Cuba: Córdoba, Gitanerías y Malagueña.

Juntos pusieron sabor a la gala con El Manisero, una famosa composición de Moisés Simons, e hicieron con sus interpretaciones finales que el público jugara su papel en el show.

Antes de la velada, el embajador de Cuba en Francia, Otto Vaillant, rindió homenaje a la cultura nacional y llamó a defenderla como exponente de la identidad, por encima de las dificultades y las diferencias.

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